Este año, la temporada del arándano peruano ha comenzado con buenos volúmenes tras dos años de escasez. "El Niño no parece haber tenido consecuencias graves y las plantas tienen buen aspecto. En cualquier caso, esperamos una buena oferta de producto peruano", comenta Lucas Wennekers, de la firma holandesa Bessies, con sede en De Lier.
"Habrá que esperar a ver cómo evolucionan los precios, pero por ahora están a un buen nivel". La campaña terminó antes de tiempo en los Países Bajos, Alemania y Polonia. En Polonia, de hecho, la producción de este año se ha visto afectada por la gran cantidad de lluvia. Por eso, cuando Perú llegó al mercado hace dos o tres semanas, no tardó en registrar una muy buena demanda. Ahora estamos en la última semana de la cosecha europea y todo el mundo se está pasando ya al producto peruano", explica Lucas.
© Bessies
"Hasta finales de año, no espero que los precios de la fruta a granel alcancen los 4 o 5 euros por kilo. Después, suele producirse un punto de inflexión cuando la oferta de Perú registra su punto álgido y se suma también la de Chile", afirma el importador de frutos rojos. Además, Lucas continúa importando la variedad tardía Centra Blue, que viene de Huelva. "Es una variedad que no suele cultivarse en el sur de España, pero que está logrando un buen rendimiento y que nos permitirá alargar la temporada".
Potencial de mercado en Asia
© Bessies"En este momento, estamos centrándonos sobre todo en las ventas al Reino Unido, Escandinavia y Europa del Este. También queremos exportar más a Asia, y por eso visitaré la Asia Fruit Logistica esta semana. Hay mucho potencial en el mercado asiático, no solo en China, donde se cultiva mucha fruta, sino también en países como Vietnam, Camboya, Tailandia y Filipinas. Ya enviamos allí un volumen significativo de fresas etíopes y también me interesa empezar a enviar frutos rojos directamente a Asia desde Perú y Chile".
La temporada de fresas etíopes comienza a finales de septiembre o principios de octubre, y la oferta se mantiene a buenos niveles hasta principios de marzo, tras lo cual no tarda en disminuir. "La mayor parte de las fresas etíopes se exporta a Oriente Medio. Solo unos pocos productores cuentan con la certificación GlobalGAP y pueden exportar a Europa. Trabajo con un agricultor que tiene la certificación en regla y ha puesto en marcha un cultivo moderno en canaletas de 5 hectáreas, así que tengo muchas esperanzas puestas en él. Eso sí, hablamos de proyectos a largo plazo. En materia de cultivo, Etiopía es un país fantástico, sin problemas en cuanto a la disponibilidad de tierras o de trabajadores. Lo que ocurre es que el país dista mucho de gozar de estabilidad. El año pasado, por ejemplo, el gobierno liberó de repente el tipo de cambio, lo que provocó un fuerte aumento de los costes para los productores extranjeros".
Lucas fundó Bessies hace algo más de dos años, lo que además de ser un guiño a su pasado en Westland es también una referencia a su enfoque en las producciones africanas de frutos rojos. "Mi objetivo sigue siendo impulsar el cultivo de arándanos en África oriental. Eso sí, con estos proyectos de cultivo a pequeña escala, lleva tiempo alcanzar volúmenes suficientes para el mercado europeo. Por eso cada vez importo más arándanos de Chile y Perú".
Inflación y su impacto en la venta de frutos rojos premium
El importador no espera una disminución del consumo de arándanos. "Sin embargo, creo que la apuesta a gran escala por variedades premium también supone un riesgo. Todo el mundo parece querer cultivar solo los frutos más grandes y dulces disponibles. Pero, en mi opinión, esta apuesta por nuevas variedades premium que se venden a precios más caros no es la mejor estrategia en un contexto marcado por la creciente inflación y unos márgenes de gasto cada vez más ajustados para la mayoría de la gente. Muchos consumidores apenas comen ya arándanos debido a su precio. En ese grupo es donde hay más potencial de crecimiento, así que habría que centrarse más en variedades más normales con capacidad para producir buenos volúmenes, porque no muchos pueden permitirse comprar frutos rojos premium. En el segmento del mercado donde todavía se consume poco o nada debido a unos precios a menudo demasiado altos es donde hay un mayor potencial de crecimiento".
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Lucas Wennekers
Bessies
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