Como muchas otras cosechas frutales, la de ciruelas de este año en Alemania ha batido récords. "El tiempo acompañó, de modo que pudimos ofrecer a los mercados ciruelas de gran calidad hasta la semana 41", afirma Kurt Halder, comprador y vendedor de OGA-OGV, empresa alemana radicada en Bruchsal. En consecuencia, la demanda de productos importados de la República de Moldavia fue relativamente baja en las primeras semanas de venta. "Sin embargo, las primeras entregas de la variedad Stanley se realizaron ya a partir de la semana 38/39. En este sentido, hubo una transición estacional sin problemas".

Umut Tekbas y Kurt Halder en el stand de OGA-OGV en la expoSE de Karlsruhe del año pasado.
No obstante, Halder califica de difícil el inicio de la temporada moldava. "El problema no fue tanto la calidad del producto, que fue buena en todo momento, sino la incertidumbre en torno al despacho de aduanas. Tuvimos que pagar un arancel del 12,5% nada más empezar la temporada, algo que no esperábamos. Para colmo, el contingente de importación se agotó rápidamente. El tipo de arancel se redujo entonces aproximadamente a la mitad y se anuló por completo a principios de octubre. Sin lugar a dudas, esta incertidumbre resulta perjudicial para la planificación y, en general, es una traba para las importaciones moldavas".
© OGA-OGVCiruelas moldavas de la variedad Stanley.
En los últimos cinco años, OGA-OGV se ha convertido en un proveedor especializado en ciruelas moldavas. Halder confirma que la empresa abastece principalmente a los mercados mayoristas de toda Alemania. "La estructura de precios hasta la fecha ha sido bastante buena y sigue estando ligeramente por encima del nivel del año anterior. Nos están ofreciendo mucha fruta demasiado pequeña, de calibre 28+, a la que le falta tamaño tanto para la venta al por mayor como para el deshuesado. Aunque hay fruta suficiente por ahora para cubrir la demanda de fruta más grande (calibre 30+/32+)". Se espera que las ciruelas moldavas estén disponibles hasta principios/mediados de noviembre.
© OGA-OGV
En el mercado alemán, la producción moldava compite sobre todo con las ciruelas de origen polaco. "Polonia tiene mucha presencia este año en particular y, en comparación con Moldavia, tiene, naturalmente, la ventaja del cruce libre de fronteras dentro de la UE y la menor distancia hasta el mercado de ventas alemán. El transporte terrestre de Moldavia a Alemania dura entre cuatro y cinco días, mientras que desde Polonia se tarda un máximo de tres días. Por otra parte, Moldavia tiene la ventaja de contar con una amplia gama de variedades: la Stanley es adecuada tanto para la venta en fresco como para el deshuesado, mientras que la President, que sigue dominando el cultivo polaco, suele ser demasiado gruesa para el deshuesado", detalla Halder. Otros conocidos países productores, como Serbia, se dedican sobre todo a la exportación en el segmento temprano.

La uva moldava, un nicho de mercado de éxito
Paralelamente a la temporada de ciruelas, la comercialización de uvas de mesa moldavas se está acelerando poco a poco. En la semana 41 llegaron a Bruchsal los primeros lotes de uvas negras con pepitas de la variedad Moldova. Las uvas italianas siguen dominando los mercados mayoristas alemanes, pero el equipo de ventas de OGA-OGV espera que la demanda aumente a partir de principios de noviembre. "En total, comercializamos unas 100 toneladas el año pasado y esperamos un volumen de ventas similar también este año". Aunque el producto se vende principalmente a través de mayoristas, un cliente del retail también lo ha puesto ya a la venta.

Uvas de mesa moldavas de la variedad Moldova.
La ventana de comercialización de la uva se concentra principalmente en los meses de noviembre y diciembre, aunque a veces se puede encontrar mercancía de las cámaras de atmósfera controlada en los mercados locales hasta febrero/marzo. "La mayor parte de la uva se sigue entregando a la vecina Rumanía", afirma Halder, que también destaca la profesionalización del sector frutícola moldavo. "Visité Moldavia por primera vez en un viaje de negocios en 2019 y es impresionante ver cómo ha evolucionado la fruticultura desde entonces. Aunque los programas AID de EE. UU. ahora han sido interrumpidos por Trump, afortunadamente ya ha habido una generosa inversión en riego y toldos, entre otras cosas, en los últimos años, por lo que hay una buena base para un mayor crecimiento. También se están llevando a cabo ensayos de cultivo con uvas sin semilla y es solo cuestión de tiempo que estas variedades también puedan comercializarse y exportarse", concluye el experto.
Visita la empresa en la expoSE de Karlsruhe: pabellón 1 / B07
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Kurt Halder
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