Las peras siguen siendo una fruta infravalorada en el supermercado. A pesar de ser una fruta rica en nutrientes y versátil, suele pasar desapercibida. Los consumidores actuales de peras tienden a tener entre 30 y 65 años, con especial representación en el grupo de edad de 40 a 55 años. Estos consumidores son fieles, diversos y cuidan de su salud, lo que demuestra que ya existe una clientela sólida y comprometida con las peras.
Sin embargo, datos recientes ponen de manifiesto una laguna: los consumidores menores de 30 años están prácticamente ausentes de la categoría. A primera vista, esto parecía un error en los datos, pero se repite en los supermercados de toda la gama de precios. Esto demuestra que los formatos de tienda no son el problema y que existe la oportunidad de generar ventas en los distintos retailers.
© Domex Superfresh Growers
"No se trata solo de un reto, sino de una de las mayores oportunidades del sector hortofrutícola", afirma Trisha Casper, responsable de información al cliente de Superfresh Growers. "Las peras ya cuentan con una clientela leal y diversa entre las generaciones de más edad, pero ganarse a los clientes más jóvenes definirá el futuro de la categoría. Estos consumidores buscan activamente alimentos que les aporten beneficios como salud intestinal, hidratación y energía, y las peras cumplen todos esos requisitos. Si podemos satisfacerlos con la información, el envase y la visibilidad adecuados, las peras pueden convertirse en un alimento habitual para la próxima generación".
Ahora que el poder adquisitivo se está desplazando hacia las generaciones más jóvenes, es el momento de atraerlas. Estos consumidores quieren frutas de calidad constante, listas para comer y con claros beneficios para la salud, y las peras encajan en este estilo de vida: son ricas en fibra para facilitar la digestión y el control del peso, son hidratantes y aportan antioxidantes y nutrientes esenciales que favorecen la salud del corazón, la fortaleza de los huesos y el control del azúcar en sangre, entre otros beneficios.
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Aunque el sector ya está invirtiendo esfuerzos en la comercialización de las peras, debe esforzarse más para conseguir que los menores de 30 años se fijen en ellas. El envasado y la visibilidad son factores importantes para salvar la distancia. El auge de las peras envasadas en bolsas, como muestran los datos de los retailers, sugiere que las familias ven valor y comodidad en este formato. Si a esto se añaden señales claras de madurez, mensajes favorables al consumo como snack y fuertes promociones en la tienda y en internet, se puede captar a nuevos compradores. Las campañas en redes sociales, las recetas y los contenidos educativos también son esenciales para introducir las peras en las conversaciones cotidianas sobre alimentación, a fin de garantizar el crecimiento de la categoría en el largo plazo.
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Julieta Castillo
Superfresh Growers
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