Para la firma holandesa SFI Rotterdam, la demanda de cerezas chilenas suele repuntar en vísperas de las navidades. "Sin embargo, sigue siendo un producto de lujo", matiza Jan Marc Schulz. Aun así, según el importador, hay posibilidades de normalizar la presencia de las cerezas en los lineales entre noviembre y febrero.
© SFI Rotterdam
"Pero todos tienen que poner de su parte", afirma el importador, que no pierde la oportunidad de hacer un llamamiento tanto a productores y exportadores chilenos como al sector del retail europeo para que hagan algo en este sentido. "Al fin y al cabo, los chilenos han estado dejando a Europa bastante de lado durante las dos últimas décadas, a pesar de las posibilidades que ofrece este mercado. Eso sí, también hace falta interés por parte del retail para convertirlo en un negocio regular. Por ahora, el interés parece algo bastante puntual. Si la demanda cae en Asia, entonces crece el interés por Europa, pero, por otro lado, al retail solo le interesa adquirir cerezas si los precios no son muy altos y resulta factible organizar promociones".
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"La calidad de las cerezas es excelente, tanto de las que llegan por avión como de las que lo hacen por mar", prosigue el importador, que se dedica sobre todo al suministro de cerezas chilenas a mayoristas especializados. Los precios de las cerezas de entre 26 y 36 mm oscilan actualmente entre 8 y 12 euros por kilo. Para los calibres más pequeños, SFI Rotterdam ofrece ahora también el popular envase de 2,5 kilos. "Sigue siendo un producto especial que destila espíritu festivo por los cuatro costados", concluye Jan Marc.
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Jan Marc Schulz
SFI Rotterdam
Mercuriusweg 12B
3113 AR Schiedam (Países Bajos)
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