La compañía ahorra un 90% de agua en comparación con la agricultura convencional. "Nuestro objetivo es crear una tecnología para producir ensaladas que sea pura, local, libre de plaguicidas, fuera de tierra y libre de insectos", explica Marie de Raismes, cofundadora con Benoit de Combaud.
Su invernadero piloto tiene quinientos meros cuadrados. Las lechugas se cultivan en carros colocados muy cerca unos de otros en hileras, que se van moviendo conforme crecen los vegetales. Una vez cultivada, la lechuga se destina a ser troceada y envasada.