Asimismo, si bien la coyuntura internacional y los cambios climáticos a nivel mundial afectaron en un comienzo el comercio de los cítricos desde Argentina, las consecuencias fueron más beneficiosas de lo especulado. “Si bien el mercado ruso no estuvo tan demandante como en otros años, su estabilidad sorprendió a muchos. Además, según nuestras fuentes, la cosecha de limón turco viene retrasada esta campaña, por lo que esperamos que tenga un efecto positivo en nuestros últimos envíos”, asevera el vocero.
La apertura de nuevos mercados en los últimos años ha sido también uno de los factores que influyeron considerablemente en los resultados de esta campaña. “Ahora estamos haciendo envíos regulares al Sudeste Asiático, principalmente la variedad de mandarinas Murcott. Si bien Indonesia es un mercado que ya vamos varios años trabajando, tenemos un cupo, el cual deseamos que sea expandido para que podamos enviar más fruta. Estamos en proceso de negociación porque este es un mercado muy interesante, el más demandante del Sudeste Asiático, y solamente competimos con la fruta australiana y sudafricana, pero nuestra fruta tiene calidad y precios más atractivos”, afirma Pérez.
“Si sumamos que Argentina está en un proceso de recuperación y estamos empezando a ser vistos como un país más predecible, la coyuntura nacional está impulsando las inversiones internacionales. A su vez, el Gobierno actual está realizando muchos acuerdos y negociaciones de apertura para nuevos mercados, por lo que esperamos que en los próximos años se abran nuevos mercados para nuestra fruta”, finaliza el representante.
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Diego Pérez
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