El color es un factor decisivo en el mercado de los cítricos. Los consumidores están acostumbrados a naranjas naranjas y limones amarillos, una naranja verde les resulta extraña, pero según Anton Bouman, de Boumanfruit, podría ser mejor que la de color naranja. La enfermedad Citrus Black Spot (CBS) sigue siendo un reto para los productores, Europa debe tener cuidado, pues parece estar perdiendo su liderazgo como mercado importante de exportación.
En mayo, Anton visitó a varios proveedores en Brasil, en el extremo norte del extenso país, en la región de Belém. Explica que es un área tropical, y que venden mucho a la industria. Dos días después voló hacia el sur en busca de naranjas de mesa. Debido a que la ciudad del norte está en los trópicos, hay muy pocas noches frías, lo que afecta al color de los cítricos, pues se necesitan noches frías para que la fruta tome color. Los consumidores no conocen las naranjas o limones verdes, pero los cítricos tropicales tienen a menudo un brix más alto, así que estas naranjas son más dulces. En su opinión la fruta tropical sabe mejor, pero cree que no se conocen los cítricos de estos colores en Europa.
Requisitos estrictos contra la CBS
Antón contradice la información de que Brasil cosechará un 30% más este año. Dice que quizás esa afirmación sea cierta en comparación a dos años atrás, pues en ese momento sufrían escasez, pero que esta será una temporada normal. Los productores están satisfechos con los volúmenes en los árboles, y no se ha reportado nada excepcional. Las circunstancias meteorológicas fueron como debían ser. La temporada probablemente comenzará a finales de junio, principios de julio.
Los problemas con las manchas, en la variedad Navel en Sudáfrica, no resultan inmediatamente en oportunidades para la exportación brasileña, pues Brasil también tiene problemas con la CBS. Los productores convencionales no se ven afectados, pues no todos están interesados en la exportación, debido al enorme mercado interno y al gran mercado de concentrados. Los exportadores que desean enviar a Europa deben cumplir con requisitos muy estrictos. Cuando Europa detecta la CBS en un lote, se le niega la entrada al mercado europeo, lo que implica que el exportador tenga que enviar los cítricos a, por ejemplo, Rusia, pero cuando se sabe porqué un lote no puede entrar en Europa, los importadores se niegan a pagar buenos precios.
Europa, en segundo lugar
Hace dos años, la CBS afectó gravemente al cultivo brasileño. Anton comenta que fue un gran problema. El país estaba muy infectado, se envió muy poco a Europa entonces, porque había mucho riesgo. Anton ha estado durante mucho tiempo en contacto con los productores, que hicieron todo lo posible para combatir la enfermedad. Estos productores están certificados como libres de CBS, por lo que el gobierno brasileño les da permiso para exportar. El proyecto ha tardado años en establecerse. Hubo que encontrar productores que estuvieran dispuestos a hacer inversiones, pues se requiere de una gran inversión para poder cumplir con los requisitos, y los pesticidas son muy caros.
La CBS es un problema en la exportación a Europa para todos los países del hemisferio sur. Uruguay, Argentina, Brasil y África están muy controlados por Europa. En África, además se agrega la polilla del manzano, para lo cual Europa estableció un tratamiento en frío. A largo plazo, las exigencias estrictas de Europa podrían volverse en su contra, pues los países exportadores empezarán a centrarse en otros mercados. Para Sudáfrica, ya no es el número uno. Asia va primero y Europa es el número dos. Deben ser precavidos con la situación, o Europa podría estar incluso más abajo.
Nuevos mercados, precios extravagantes
En América Latina, los exportadores también están cambiando su enfoque a otros mercados, al enorme mercado asiático. A largo plazo, seguramente en Europa aumenten los precios de exportación. Sudáfrica está intentando tener acceso directo a India, y en general, los precios pagados por la fruta en China son mejores que los precios en Europa. Egipto también está centrándose más en China.
Los exportadores brasileños no son una excepción a esta tendencia. Anton cuenta que el mundo es un pañuelo, y mucho más con la comunicación moderna dónde se puede leer de todo. Por ejemplo, FreshPlaza, que publica noticias internacionales. Todo el mundo habla inglés y eso hace que el mundo parezca más pequeño. Si un exportador brasileño lee sobre las oportunidades en China, no hay razón para no investigar estos mercados por sí mismo. Si esta tendencia a enfocarse en el mercado chino continúa, habrá consecuencias para los precios en Europa. El año pasado, se dijo que los precios eran extravagantes, y en efecto, eran más altos que en el año anterior, pero si se comparan con lo que China paga, son muy normales. No es difícil bajar los precios, pero sí lo es aumentarlos.
Es complicado saber los precios de esta temporada, continúa Anton. Los informes muestran que también podría haber problemas con las Midnight y Delta de Sudáfrica, lo que sería un gran inconveniente. Sin embargo, sigue siendo difícil decir cuándo serán tasados de nuevo los cítricos fuera del mercado. El pomelo sudafricano cuesta unos 20 euros, pero los limones cuestan 40 euros y se venden también, concluye.