La temporada de espárragos promete ser emocionante. Después de varios años de problemas meteorológicos y de rendimiento, combinados con la disminución del consumo de las generaciones más jóvenes, los problemas de este año son de un orden completamente diferente. El coronavirus se ha apoderado de Europa. Las fronteras se han cerrado, lo que impide el acceso de los trabajadores temporeros, mientras que el cierre de restaurantes y hoteles significa que se ha perdido un mercado importante. A pesar de todo esto, el productor de espárragos Franz Allofs, de la empresa alemana Spargelhof Allofs, conserva el optimismo. Franz acaba de comenzar con la cosecha en campo abierto.
Trabajadores temporeros polacos
"Las cantidades aún son pequeñas, pero la cosecha despegará después de Pascua", dice Allofs. El principal problema del sector es la mano de obra para la cosecha. "En este momento todavía hay suficientes trabajadores, pero después de Pascua tendremos que ver cómo sigue. Siempre hemos empleado a trabajadores de Polonia y muchos ahora tienen miedo de viajar. Estos son empleados leales con quienes hemos estado trabajando durante años. Este año tendremos que buscar soluciones porque no vamos a poder contar con todos ellos".
Desde hace varias semanas, los políticos y los actores del sector hortofrutícola barajan la idea de que los desempleados del sector de la restauración, los estudiantes y los trabajadores con jornada reducida pueden ayudar con la cosecha de hortalizas en Alemania. Según Allofs, bastantes personas han respondido a este llamamiento. Sin embargo, dice que no es tan simple como parece. "Ya hemos contratado a trabajadores alemanes para la recolección y el pelado, quienes nos contactaron espontáneamente. El problema es que estas personas solo nos pueden asegurar sus servicios hasta finales de abril. Entonces, apenas vale la pena formarlas. Las personas que trabajan por cuenta propia, como por ejemplo los artistas independientes, no tienen esta limitación y pueden comprometerse hasta el final de la temporada de espárragos el 24 de junio. Por supuesto, contratamos a estas personas de inmediato".
“Tendremos que esperar a ver cómo van las ventas. Las ventas particulares de pequeño volumen han sido buenas hasta ahora. Por supuesto, sería poco práctico que pudiéramos reunir suficientes trabajadores y al final no se vendieran los espárragos”. Allofs no ha preparado todas sus parcelas cultivadas para que la cantidad de trabajo corresponda al número de trabajadores. Si fuera necesario, estas superficies también podrían cosecharse después. “Tendremos algunas pérdidas, pero hay que saber priorizar”.
"Cada día hay algo nuevo. Todos los días se cierra otra frontera, obligándonos a encontrar un nuevo mercado. Las asociaciones hacen un inmenso esfuerzo para asesorarnos y hacen todo lo posible para garantizar que siempre haya suficiente personal. Me gustaría aprovechar esta oportunidad para agradecerles todo lo que hacen".
Familia Allofs
Coste de producción de 4,50 €/kgA pesar de todos sus esfuerzos, Allofs prevé que algunas parcelas no se cosecharán este año. "El 24 de junio veremos cómo se habrá desarrollado la temporada. Hay tantos cambios que es imposible hacer un pronóstico en este momento". Allofs espera que en Semana Santa los precios aumenten ligeramente después de que los volúmenes de la semana pasada fueran demasiado grandes y los precios demasiado bajos. "Tenemos un coste de producción de 4,50€ euros por kilo, mientras que el mercado está regulado por la oferta y la demanda, por lo que debemos asegurarnos de cubrir nuestros costes". Allofs no va a caer en la tentación de las ofertas baratas: "Siempre hay quienes quieren socavar a los demás. Tenemos que poder cubrir nuestros costes para mantener la cultura del espárrago en Alemania. Cada año es diferente, cada año es emocionante. Ese también es el atractivo de nuestra profesión".
Para más información:
Franz Allofs
Spargelhof Allofs
Broecksteg 5
47608 Geldern-Walbeck (Alemania)
Tel.: +49 (0) 28 31 / 33 82
mail@spargelhof-allofs.de
www.spargelhof-allofs.de
