Después de su primera incursión en la venta de pitahaya, la opinión de un transportista es que la demanda del peculiar producto parece buena.
Desert Pacific Growers comenzó a enviar pitahaya convencional a mediados de mayo desde México, aproximadamente dos semanas más tarde de lo normal para la temporada. "La fruta no tuvo suficiente calor cuando lo necesitaba, por lo que los productores la retrasaron unos 15 días para aumentar la coloración", dice Alex Madrigal, de Desert Pacific Growers (DPG), en Nogales, Arizona, quien señala que la empresa trabajará con dos cargas por mes (con tres cargas en agosto) hasta principios de octubre.
La fruta, procedente de Yucatán, México, es convencional, aunque Madrigal señala que la fruta ecológica llegará en algún momento. "Estamos trabajando con un productor que tiene alrededor de 15-20 hectáreas convencionales y tiene pequeños productores familiares con los que trabaja. Eso nos permite tener oferta suficiente y estable durante todo el verano", explica Madrigal. "En cuanto al producto ecológico, estamos produciendo pitahaya ecológica nosotros mismos, así que falta un año y medio para venderla con la marca Covilli Brand Organics, la empresa hermana de DPG".
Movimiento constante de pitahaya
Aunque DPG no tiene un punto de referencia sobre el movimiento de pitahaya en esta época del año, Madrigal siente que la demanda es sólida. "A pesar de los desafíos que implica la introducción de un nuevo producto, hemos sido capaces de vender las cargas que recibimos con bastante rapidez", continúa.
Esos desafíos incluyen el lanzamiento de un producto en medio de una pandemia mundial. "Queríamos empezar a envasar con cartón, por ejemplo. Pero debido a los retrasos y a los pedidos atrasados de la pandemia, no pudimos conseguir las cajas, así que tuvimos que recurrir al plástico y reimaginar cómo íbamos a etiquetarlas", expresa Madrigal. "Hubo diferentes retrasos porque todo el mundo está teniendo retrasos en sus pedidos. Ese es uno de los motivos que hicieron que fuera muy difícil empezar".
En cuanto a los precios, han bajado un poco desde que DPG comenzó en mayo. En ese momento, la fruta se movía en torno a los 30 dólares, mientras que ahora el precio está en unos 20 dólares. Madrigal señala que podría ser porque, para algunos consumidores y retailers, la pitahaya mexicana se considera de menor calidad que la ecuatoriana o vietnamita. Sin embargo, espera trabajar para mejorar esa reputación, dado que la fruta es originaria de México.
Para más información:
Alex Madrigal
Covilli Brand Organics Inc.
Tel.: +1 (520) 377-2202
alex@covilli.com
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