La cosecha de 2021 está casi terminada. Los productos recibidos siguen siendo heterogéneos en términos de calidad y cantidad según la región y la variedad. Los volúmenes registrados hasta la fecha son superiores a los del año pasado (1.068 millones frente a 1.052), pero esto no significa que la cosecha total vaya a ser mayor. En efecto, la cosecha se ha iniciado antes este año (lo que explica la diferencia con el año anterior); además, los rendimientos observados son, en general, entre un 8 y un 15% inferiores a los del año pasado y van acompañados de una importante presencia de almendras pequeñas y dañadas. Estos elementos tienden a confirmar que la cosecha será de unos 2.800 millones de libras (= estimación objetiva). Los agricultores gravemente afectados por la sequía están retirando los huertos con peor rendimiento. El menor tamaño de las cosechas, el aumento de los costes de producción y el temor a las posibles consecuencias de una sequía hacen que los agricultores eviten comprometerse con las ventas a largo plazo. 
Por segundo mes consecutivo, las ventas nuevas han descendido
significativamente, con un descenso en septiembre del 28% respecto al año precedente (232 millones frente a 298 millones). Los compromisos (mercancías vendidas pero no enviadas) siguen la misma trayectoria con una fuerte caída del 34%, lo que debería traducirse inevitablemente en un menor volumen de expediciones en los próximos meses. Esta situación; generada tanto por la falta de voluntad de los californianos de
vender a largo plazo como por la débil demanda a corto plazo (los compradores están bien abastecidos, la demanda local se alimenta de las existencias de los importadores), acaba de permitir una fuerte caída de los precios al contado.
Descenso de los precios
La publicación del último informe de la junta directiva de la almendra, el 13 de octubre, vino acompañada de una fuerte corrección de los precios de unos 0,15 $/lb (0,28 €/kg), seguida de una nueva caída de 0,10 $/lb esta semana. Así, las almendras Std5 han pasado de 2,45 $/lb a 2,20 $/lb en 10 días. Sin embargo, este notable descenso no es uniforme, ya que los calibres grandes siguen siendo caros.
Aunque los californianos se inclinan por bajar los precios hoy para impulsar la demanda, no hay que perder de vista que todavía tienen muchas existencias del año pasado que vender para liberar existencias para la cosecha de 2021. ¿Y su posicionamiento dentro de unos meses, cuando resurja el temor a las consecuencias de la escasez de agua latente?
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