Según el BLE, la Navelina española siguió predominando en el segmento de las naranjas, con un control firme en el mercado. Las Navel y, en mayor medida, las Salustiana también procedieron de España y se vendieron con fuerza en determinados puntos. La caja de 9 kg de Newhall de Portugal costaba 14 € en Fráncfort. La oferta fue complementada con Navelina y Navel griegas sin tratar, Washington Navel turcas y Navel marroquíes. Las naranjas italianas Moro y Tarocco seguían predominando en el segmento de naranjas sanguinas. La naranja Cara Cara de España completó el surtido.
La Sanguinelli española ganó protagonismo y tuvo ventas enérgicas en algunos puntos. En general, la disponibilidad fue suficiente para satisfacer la demanda. No fue particularmente pronunciada, pero había mejorado en algunos lugares como resultado de las bajas temperaturas. La calidad de la fruta, sin embargo, fue mayoritariamente convincente. Los precios, en su mayoría, se mantuvieron en su nivel anterior. Los productos ligeramente deteriorados, naturalmente, tuvieron que venderse a precios reducidos.
Manzanas
La gama no cambió significativamente, los lotes nacionales dominaron el mercado continuamente. En general, la oferta y la demanda estuvieron equilibradas.
Peras
La oferta estuvo dominada por las peras italianas y hubo suficiente oferta para satisfacer la demanda. La demanda fue bastante débil y no cambió mucho desde la semana anterior.
Uva de mesa
Las ventas no fueron demasiado buenas. La demanda no siempre pudo seguir el ritmo de la disponibilidad. Sin embargo, los precios a menudo se mantuvieron en sus niveles anteriores.
Cítricos pequeños
Las mandarinas españolas fueron mayoría. Las variedades más comunes fueron las Clemenvilla, Nova y Tacle.
Limones
La disponibilidad fue suficiente para satisfacer la demanda. Sin embargo, los comerciantes pudieron aumentar sus precios aquí y allá, siempre y cuando las ventas mejoraran.
Bananos
Las ventas fueron bastante inconsistentes: hubo aumentos de precio y concesiones, como siempre dependiendo de la demanda.
Coliflor
Predominaron los suministros italianos y franceses. La competencia entre ambos productos dejó poco espacio para que los distribuidores aumentaran sus precios.
Lechuga
Solo se pudo acceder a la lechuga iceberg a través de envíos españoles. Los precios bajaron, en la mayoría de los casos. Esto se debió a una demanda reducida o a una oferta demasiado abundante.
Pepinos
Los pepinos españoles dominaron los mercados. La oferta no siempre era suficiente para satisfacer la demanda, lo que significaba que los precios a menudo subían.
Tomates
Las ventas fueron muy inconsistentes. Se observaron aumentos y reducciones de precios.
Pimientos dulces
La demanda no fue particularmente fuerte. Los precios bajaron a menudo, en parte debido a las extensa oferta.
Fuente: BLE