La temporada de cítricos de este año ha sido extraordinaria. "Esperábamos menos naranjas de Sudáfrica, pero nadie pensó que mermaría tanto el volumen. En las últimas semanas, solo se han enviado sistemáticamente a Europa el 50% de los volúmenes del año pasado. Esa es una diferencia demasiado grande, por lo que los precios se han disparado", dice Eddy Kreukniet, de Exsa Europe.
"Los volúmenes se están corrigiendo, y Sudáfrica se está poniendo al día. Eso es bueno, y necesario, porque todavía hay una larga temporada por delante antes de que empiecen a llegar volúmenes decentes desde España. Las tres zonas de producción sudafricanas ya disponen de buenos volúmenes. Los precios siguen siendo altísimos, hasta un 30% más altos que el año pasado".
"Nuestro sector se ha sorprendido bastante por los problemas que está causando el nuevo tratamiento de frío que exigen la normativa para evitar la entrada de Thaumatotibia leucotreta (falsa polilla o FCM) a Europa. Al sector exportador le costó unas semanas acostumbrarse a este nuevo requisito, y algunos proveedores lograron lidiar con ello mejor que otros", continúa Eddie.
"Por ejemplo, los productores del Cabo Occidental ya están bien equipados para hacer frente a las restricciones del mercado norteamericano. Las autoridades de inspección también pasaron las primeras semanas tratando de averiguar cómo hacer frente a estas normativas. Hubo muchas preguntas durante esas primeras semanas, pero, a estas alturas, el mercado está lidiando con esas nuevas normas".
Exsa Europe no tuvo problemas con los rechazos por el tratamiento de frío. "Sin embargo, hubo retrasos, por lo que la fruta llegó dos o tres semanas después. Lidiar con esto requirió mucho tiempo y energía. Tuvimos que reducir nuestros volúmenes enviados a varios retailers durante esas semanas; simplemente no había productos disponibles. Eso afectó a todo el mercado. Los aumentos de costes están causado mucho revuelo. Solo el flete marítimo, para las naranjas, cuesta 1,50 € más que el año pasado", explica Eddy.
"Y encima ha habido aumentos en los costes de la energía y el embalaje, entre otros. Es difícil trasladar estas subidas de precios a los clientes, por lo que se podría decir que el sector está inquieto. El problema logístico actual es más manejable que el año pasado, pero también podría deberse a que se están enviando entre un 20% y un 30% menos de contenedores a Europa esta temporada. La pregunta es: ¿cómo será la situación logística cuando los barcos vuelvan a estar llenos en invierno?".
"El mercado de la mandarina fue excelente en agosto. Suele ser un mes difícil para las mandarinas, pero tal vez las ventas fueron buenas debido a una menor oferta de frutas de verano del sur de Europa. La temporada de mandarina en el extranjero también promete terminar con una nota alta", dice Kreukniet, que es menos optimista sobre el futuro del pomelo.
"Parece que cada año se consume menos pomelo. Están, por supuesto, las ventas fijas a los retailers y Europa del Este, pero los volúmenes están disminuyendo en un 10-20% anual. Sin embargo, los precios no reflejan eso; este año, son incluso más bajos que la temporada pasada. Eso, sin duda, se está convirtiendo en un problema para el sector".
"Esperábamos muchos limones y un mercado que se moviera a ese nivel más bajo. Y, de hecho, eso es lo que ha sucedido debido a los altos volúmenes de Sudáfrica y Argentina. Esos grandes volúmenes están disminuyendo lentamente. Sin embargo, tendremos que hacer todo lo posible para mantenernos al día en las próximas semanas", añade Eddy.
"Dentro de un mes, España y Turquía entrarán en el mercado. No queremos que haya una gran superposición de producto como el año pasado. Eso hizo que los precios cayeran entre 5 € y 7 € por caja en cierto momento. Sin embargo, el mercado de la lima de Sudáfrica fue excelente en agosto. La mayor parte del tiempo fue impulsada por la oferta, lo que condujo a buenos precios", concluye Eddy.
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