"La belleza de nuestro sector es que no hay un año o incluso una semana en que todo sea igual. Los precios, las existencias, la calidad y la disponibilidad de contenedores varían: siempre pasa algo con cebollas", declara el gerente de ventas de Mulder Onions, René Vanwersch.
René Vanwersch, gerente de ventas de Mulder Onions
Según Vanwersch, el mercado de exportación no está muy atareado en este momento. "Puede estar algo más tranquilo de lo normal en esta época del año, pero hay una demanda bastante amplia, y las ventas van sin problemas. La primera mitad de la temporada de cebollas ha sido buena en los últimos años. Sin embargo, este año hay escasez a nivel mundial. Estamos recibiendo los pedidos más extraños, por ejemplo, de América del Norte, México y Guatemala. Además de los altos precios de la cebolla, hay pocos contenedores, y los aranceles continúan altos. Pero eso es algo que afecta a todo el mundo. La pregunta entonces es si seguir la tendencia o vender con cautela".
"La mayoría de las exportaciones van a África. Hay cierta demanda de Extremo Oriente, pero esas exportaciones no se están produciendo tan rápido. Todavía hay muchas cebollas chinas en el mercado y Centroamérica no es actualmente un gran destino para Mulder Onions". Los precios son buenos, y René espera que se estabilicen pronto. "Nadie quiere que el mercado caiga. Tampoco quiero que suban los precios, porque entonces saldríamos rápidamente del mercado. Ese no es un problema para algunos destinos, pero sí lo es para los países africanos. Con los precios actuales, otros países están al acecho. En Senegal, por ejemplo, ya están apareciendo cebollas marroquíes", continúa René.
"Una gran ventaja que tenemos es que, aparte de un poco de Fusarium, nuestras cebollas tienen pocos problemas de calidad. Sin embargo, aún queda por ver cómo estarán las cebollas cuando salgan del almacén más adelante. Se habla mucho de la sequía ahora, pero todo lo que se plantó a tiempo recibió mucha lluvia antes de que, literal y figuradamente, se secara. Hay muchos menos tamaños grandes disponibles, lo que será problemático durante la temporada. Hay que recoger todos los calibres por encima de 70. Esto va a tomar cierto trabajo. Si se envían muchas cebollas de calibre 50-70 a África, nos quedaremos con las cebollas de calibre Triplet, que es un mercado mucho más difícil. Especialmente si, por ejemplo, un mercado como Filipinas, que siempre es bueno para este calibre, no concede licencias".
Mulder Onions se especializa en la exportación de patatas y cebollas, pero también exporta productos como ajo, zanahorias, repollo y otras verduras de secano. "Las cebollas, principalmente holandesas, son nuestro principal negocio, pero también ofrecemos el paquete completo de importación. Por ejemplo, tenemos cebollas españolas de junio a marzo. Luego, de marzo a julio, importamos nuevas cebollas de Nueva Zelanda, Australia, India, Egipto y América del Sur para el mercado europeo. También hemos ofrecido a nuestros clientes cebollas francesas, alemanas y austriacas, así como cebollas peladas de Polonia, durante muchos años. Pero las cebollas amarillas constituyen la mayor parte de nuestro comercio. Las ventas de cebollas rojas están fluyendo bien en este momento. Y estamos consiguiendo precios firmes para las patatas. Estos pueden seguir los precios de la cebolla", concluye René.
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