¡Suscríbase a nuestra newsletter y manténgase al día con las últimas noticias!

Suscribirse Ya soy suscriptor

Está usted usando un software que bloquea nuestros anuncios.

Ya que publicamos noticias gratuitamente, dependemos de los ingresos de nuestros banners. Por favor, le rogamos que desactive su bloqueador de anuncios y recargue la página para poder seguir visitando esta web.
¡Gracias!

Haga clic aquí para leer la guía de cómo desactivar su bloqueador de anuncios.

Sign up for our daily Newsletter and stay up to date with all the latest news!

Suscripción I am already a subscriber

Dinamarca: "Las ventas de hortalizas cultivadas en la zona aumentan un par de puntos porcentuales al año"

Cuando Dinamarca ingresó en la Unión Europea en 1973, Nordic Greens (que entonces se llamaba Alfred Pedersen) no tardó en plantar tomates en sus invernaderos. Fue la primera cosecha comercial de tomates del país. "La empresa, fundada en 1948, se dedicaba al cultivo de pepinos, pero mi padre estaba convencido de que, tras la entrada en la UE, los tomates daneses alcanzarían precios más altos", empieza diciendo el director general, Mads Ulrik Pedersen.

Actualmente se pueden encontrar en los invernaderos de Odense pepinos, tomates y pimientos. Y esta semana se ha plantado la primera lechuga en los 75 años de historia de esta empresa en un nuevo complejo de invernaderos de última generación. Todo un estreno.


Mads Ulrich.

Solo se cosechan tomates maduros
Desde el principio se hizo hincapié en la calidad. Hoy eso se traduce en envases llamativos y fruta que únicamente se cosecha madura. "No podemos copiar a otros países productores; producir aquí es más caro. Así que debemos aportar algo más. Cosechamos, clasificamos y envasamos nuestros tomates a mano, garantizando así una calidad excelente", señala Mads.

"Los tomates solo se cosechan cuando han madurado y han alcanzado todo su sabor. Y clasificar y envasar a mano significa evitar que el producto se dañe en las máquinas clasificadoras. Este método cuesta un poco más, en cuanto a mano de obra, pero los consumidores daneses están dispuestos a pagar más por productos locales de alta calidad. Sin embargo, hasta cierto punto, la inflación está presionando a los verdaderos productos premium".

Pimientos y pepinos en los invernaderos de Nordic Greens.

Poco convencional
Durante la primera década, los tomates se vendían en subastas en Odense, pero en 1982, el padre de Pedersen fue el primer productor de Dinamarca que recurrió a la venta directa al cliente. "Incluso hoy en día, somos uno de los pocos productores que no están afiliados a la cooperativa, que pasó de ser una subasta a una asociación de productores donde, además, ya no se realizan ventas programadas. Creemos firmemente en el contacto directo con el cliente", explica Mads.

El branding (el 90% de lo que cultiva Nordic Greens se comercializa bajo sus marcas Katrine & Alfreds y Pedersens Udvalgte), las promociones en tienda, las historias y una gama de variedades especiales son también algunas de las herramientas utilizadas para hacer de los tomates, pimientos y pepinos de la empresa un producto único y conocido en los supermercados daneses. "Todo eso también es necesario para competir con las grandes empresas de cultivo".

Local y ecológico
Los invernaderos de Nordic Greens suman 47 hectáreas, repartidas en seis fincas. La más grande, por cierto, está en el sur de Suecia. "Antes exportábamos allí, pero nuestra filosofía coincide con la tendencia actual de proximidad. Así que, para el mercado sueco, tenemos verduras de un invernadero sueco. Así, en el supermercado de ese país se encuentran productos con la bandera sueca en el envase", ríe Mads, y añade que, en realidad, esta tendencia asegura el futuro de la empresa.

"La gran demanda de productos locales de los países escandinavos no nos perjudica ni a nosotros ni a otros productores daneses. Cada año, las ventas de hortalizas cultivadas en la zona aumenta un par de puntos porcentuales. Y aquí, en Dinamarca, no tenemos la feroz competencia a la que se enfrentan los productores en un país hortícola como Países Bajos".

De los cultivos de Nordic Greens, el 40% son ecológicos. "Eso es considerable, pero también lo es el mercado ecológico de Dinamarca. Al menos el 5% de los tomates y pepinos de las tiendas son ecológicos. Es la mayor cuota de Europa. Pero es difícil cultivar ecológicamente. No se puede cultivar en sustrato; tiene que ser en suelo, y hay que mantener alejados a los insectos con mallas, por lo que los rendimientos son un 20% inferiores a los convencionales. Aunque los márgenes de beneficio no son más altos y el riesgo también es mayor, creemos que sigue mereciendo la pena", afirma el director general.

No más energía fósil
Los agricultores ecológicos, por definición, valoran la sostenibilidad. "Utilizamos calor residual para calentar los invernaderos y, cuando la electricidad es asequible, una caldera eléctrica. Las tarifas actuales no son tan malas, y espero que sigan así. Ya no utilizamos energía fósil. Los abejorros polinizan las flores, regamos con agua de lluvia, controlamos las plagas con estrategias integradas de protección de cultivos y utilizamos cartón o plástico reciclable para los envases. Además, queremos ser neutros en carbono para 2030".

Aunque la energía está bastante bien de precio, según Mads, este invierno solo se ha seguido cultivando el 25% de lo habitual. "Los costes difieren mucho de países como Marruecos y Turquía, aunque tengan costes de transporte más altos. Creo que la UE está dejando entrar demasiados productos de terceros países. Los próximos inviernos serán duros para nosotros, porque los costes de calefacción siempre serán más altos que en 2020. Y todo el mundo sabe que la mano de obra cuesta más aquí, aunque eso significa que no tenemos problemas para atraer mano de obra estable del extranjero. Por otro lado, las empresas de cultivo extranjeras apenas interfieren: nuestra estructura de costes es sencillamente demasiado alta", admite Mars.


Abeja.

El resultado es el cultivo eficiente. Esa es precisamente la intención del flamante invernadero donde Nordic Greens ha plantado esta semana sus primeras lechugas hidropónicas. "Tiene paneles solares y pantallas dobles. Todo el diseño busca la eficiencia y es único en el mundo. Estoy impaciente por cosechar las primeras lechugas", concluye Mads con entusiasmo sobre este nuevo proyecto, que vuelve a dar fe del brillante futuro del cultivo danés de hortalizas en invernadero.

 

Para más información:
Mads Ulrik Pedersen, CEO
Nordic Greens
217 Assensvej
5250, Odense, Dinamarca
+45 659 62 927
info@nordicgreens.dk 
www.nordicgreens.dk 

Fecha de publicación: