Alemania: Penny vacía sus estanterías
Las causas del drástico descenso del número de insectos se debe en gran parte a nuestra agricultura "industrial". Mediante el uso intensivo de plaguicidas y la ausencia de estructuras como sotos y zonas tampón, se mata a los insectos de forma directa o provocando que ya no encuentren las fuentes de alimento adecuadas. El aumento de la destrucción de su hábitat y el cambio climático también influyen.
Para informar a sus clientes sobre las consecuencias inmediatas de la muerte de los insectos, Penny ha retirado de su supermercado de Langenhagen (Markplatz 5) los productos que ya no estarían disponibles si la muerte de insectos no cesa. De los 2.500 artículos del surtido de Penny, en torno al 60% dependen de forma directa o indirecta de la polinización de los insectos.
"Me quedé atónito cuando vi la lista. Uno no se da cuenta de la cantidad de productos que desaparecerían sin la polinización de los insectos. Tenemos que hacer todo lo posible por detener la matanza de insectos, así que estoy muy agradecido de que Olaf Lief –ministro de Medio Ambiente, Energía, Construcción y Protección Climática de Baja Sajonia– apoye esta iniciativa. También queremos hacerles ver a nuestros clientes lo fácil que tienen ayudar a las abejas, por ejemplo, creando jardines con flores u hoteles para insectos en sus balcones o en sus jardines", explica Stefan Magel, director de operaciones de Penny. "De lo contrario, la naturaleza enmudecerá irreparablemente".
Fuente: Penny