La próxima edición de la feria Macfrut (3-5 de mayo de 2023, Rímini, Italia) acogerá la Exposición de Viveros e Innovación Varietal, donde se hará un balance de la situación a nivel mundial. En el marco de este evento, presentamos una serie de entrevistas con expertos en investigación sobre diferentes especies frutales. Hoy hablamos de cerezas con Stefano Lugli, coordinador científico de la nueva exposición de Macfrut.
Causó revuelo la noticia publicada en la prensa especializada sobre los primeros resultados de investigaciones biotecnológicas en marcha en EE. UU. y Reino Unido. Varias start-ups apoyadas por multinacionales del sector y algunas instituciones de investigación internacionales están invirtiendo fuertemente en el fitomejoramiento de la cereza, gracias a las nuevas técnicas de mejora genética (NBT, por sus siglas en inglés).
FreshPlaza (FP): ¿Dónde estamos ahora?
Stefano Lugli (SL): Gracias a las nuevas tecnologías de mejora genética basadas en la edición del genoma y la cisgénesis, en un futuro próximo se difundirán variedades de cerezas sin hueso. Además, será posible cultivar variedades resistentes al agrietamiento, plantas resistentes a enfermedades y capaces de adaptarse a los cambios climáticos en curso. Con las nuevas técnicas de mejora genética se obtendrán variedades mejoradas, idénticas a las tradicionales, con costes decididamente inferiores a los del fitomejoramiento habitual: esto es gracias a técnicas de selección más rápidas y sobre todo más precisas.
FP: ¿Y en Europa?
SL: La situación está evolucionando. Hasta que las nuevas técnicas de mejora genética sean admitidas en la legislación europea, los nostálgicos de las cerezas de siempre, como los simpáticos amigos de Slow Food o la Asociación Italiana de la Cereza, podrán dormir tranquilos y continuar su lucha contra los molinos de viento en salvaguarda de la biodiversidad o dar un premio a quien escupa más lejos un hueso de cereza. Con mucho gusto yo daría este premio a aquellos que crean verdadera innovación.
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FP: Volvamos a la realidad. ¿Hay alguna novedad?
SL: El profesor Quero García lo expresó con claridad durante el International Cherry Symposium 2022. Las metodologías de selección asistida están dando un gran impulso a quienes trabajan en la mejora genética tradicional. Se han identificado diferentes marcadores moleculares para algunas características importantes como el tamaño de las cerezas, su color, la firmeza de la fruta y la resistencia al cracking. Son herramientas técnicas que se han convertido en imprescindibles para quienes trabajan hoy en día en la mejora genética del cerezo, sobre todo porque muchos de los objetivos de ayer y de hoy en el fitomejoramiento de la cereza solo se han conseguido parcialmente.
FP: ¿En qué nuevas variedades deberían centrarse los productores?
SL: Según datos de la CPVO, la oficina comunitaria de variedades vegetales, cada año se solicitan una media de 10 patentes de nuevas variedades de cereza. Solo en Europa ya tenemos 150. Así que, ciertamente, no falta variedad en la oferta. Lo que falta es una evaluación previa que debería anticipar la puesta en el mercado de las nuevas variedades. Ocurre con frecuencia que una innovación genética se presenta como revolucionaria, la panacea de todos los males. Muchas veces no es así, y por desgracia son los productores los que salen perdiendo, los primeros atraídos por estas quimeras varietales.
La Exposición de Viveros e Innovación Varietal de Macfrut incluye cinco encuentros dedicados a las actividades de mejora genética de fresas, kiwis, uvas de mesa, manzanas y cerezas. Tras una charla introductoria a cargo de expertos de renombre internacional, se dará la palabra a quienes crean y difunden la innovación.
Para más información:
www.macfrut.com
info@macfrut.com