La venta de castañas no ha empezado como se esperaba, aunque últimamente ha dado algunas señales de recuperación. Un operador mayorista explica a FreshPlaza que "las altas temperaturas de octubre no han favorecido el consumo. Las castañas son un producto típico del otoño, se relacionan con los meses fríos. No podemos decir que las últimas semanas hayan sido así".
De hecho, las temperaturas no han caído hasta los últimos 7-10 días. Por tanto, el consumo ha empezado a subir levemente. En esta época, el producto puede proceder de Italia o de España.
"Los precios varían según la calidad. Pueden ir de 2,80 a 7 euros el kilo. El calibre y el origen influyen mucho en eso. Nuestros consumidores prefieren las castañas grandes", dice el operador.
El operador utiliza una línea procesadora muy precisa para la clasificación del producto. En el proceso, se retiran las castañas afectadas por Cydia. Desde el punto de vista de la producción, la avispilla del castaño ha mermado la cosecha en los últimos años. Sin embargo, la producción ha regresado a la normalidad gracias a la suelta del insecto antagonista, Torymus sinensis.