No se puede rastrear el origen de muchos productos ecológicos vendidos en la Unión Europea. Y en los casos en los que es posible saber quién ha sido el productor, a menudo lleva más de 3 meses rastrearlo, según un estudio realizado por el Tribunal de Cuentas Europeo. La investigación es la continuación de una investigación ya comenzada en 2012. El Tribunal de Cuentas evaluó si el sistema de control de la Unión Europea para la producción, procesamiento, distribución e importación de productos ecológicos ofrece ahora a los consumidores una mayor certeza.
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El Tribunal de Cuentas observa que el sistema de control ha sido mejorado y que las recomendaciones anteriores se han implementado en su mayor parte. Los Estados miembros, que fueron controlados en 2012, han tomado medidas para mejorar sus sistemas de control y la Comisión Europea ha reanudado las visitas de inspección, habiendo visitado ya la mayoría de los Estados miembros. Sin embargo, sigue habiendo una serie de deficiencias: el uso de medidas de ejecución a la hora de imponer sanciones por incumplimiento no está armonizado en toda la Unión Europea, y las autoridades de los Estados miembros y los organismos de control a veces comunicaban tarde los casos de incumplimiento.
El Tribunal de Cuentas recomienda a la Comisión Europea lo siguiente:
- abordar las deficiencias pendientes en los sistemas de control y presentación de informes de los Estados miembros;
- mejorar la vigilancia de las importaciones, entre otros mediante una mejor cooperación con los organismos de acreditación y con las autoridades competentes de otros importantes mercados de importación;
- realizar controles de trazabilidad completa de los productos ecológicos.
Para obtener más información, consulte el informe "El sistema de control para productos ecológicos ha mejorado, pero aún quedan algunos desafíos", en la página web del Tribunal de Cuentas Europeo.
Fuente: Tribunal de Cuentas Europeo